La enseñanza como un legado eterno: reflexiones del profe Hugo

Por Diego Montalvo
17 Diciembre 2024
Entre la docencia y la trascendencia
En una tarde tranquila, el profesor Hugo Campos nos recibe con una sonrisa serena y una mirada reflexiva, el tipo de expresión que uno podría esperar de alguien que ha pasado por grandes cambios en su vida.
Originario del Estado de México, Mr. Hugo nos comparte su historia de transformación, inspiración y adaptación como docente en una nueva región de México. Es una narrativa que encapsula las dificultades y recompensas de un cambio que, aunque inesperado, ha dejado una huella profunda en él y en aquellos que lo rodean.
Un cambio inesperado
“La necesidad”. ¡Así de simple!, responde Hugo al preguntarle qué lo llevó a mudarse de la Ciudad de México a Cabo San Lucas. La pérdida de su empleo anterior fue el detonante de esta transición que, según confiesa, no estaba en sus planes.
Apenas había adquirido una casa en su lugar de origen, y los proyectos familiares giraban en torno a arreglarla y consolidar su hogar. Sin embargo, la oferta de trabajo como profesor en un colegio local lo cambió todo.
“Si no se hubiera presentado esta oportunidad, probablemente no hubiera tomado la decisión de emigrar”, reflexiona. Pese a los desafíos, Mr. Hugo reconoce que esta mudanza representó una posibilidad de crecimiento tanto personal como profesional, y aunque adaptarse a la nueva ciudad no ha sido fácil, encuentra consuelo en su trabajo y en su familia.
Adaptarse a lo nuevo
Para nuestro profesor de Biología, la adaptación a Cabo San Lucas ha sido una mezcla de experiencias agradables y retos inesperados. “La comida aquí es muy diferente y cara”, dice con una sonrisa irónica, señalando también los elevados costos de renta. Sin embargo, lo que hace tolerable esta transición es el ambiente en el colegio donde trabaja.
“Los alumnos aquí hacen que me sienta a gusto. Son receptivos, tienen hambre de aprender y eso es muy estimulante para un profesor”, comenta con entusiasmo.
Una de las motivaciones más fuertes para quedarse ha sido que sus hijas también forman parte de la comunidad escolar. Para Mr. Hugo, verlas crecer en un entorno seguro y estimulante le da sentido a los sacrificios realizados.
Ventajas y desventajas
El profesor no duda en compartir las diferencias entre su antiguo hogar y su nueva residencia. La Ciudad de México, pese a ofrecer una variedad de servicios y acceso rápido a muchas comodidades, también sufre por la inseguridad,el tráfico y la contaminación.
Cabo San Lucas, aunque más tranquilo, presenta sus propios desafíos en cuanto al costo de vida y las costumbres locales. Aun así, la seguridad y la calidad de vida para su familia prevalecen como una ventaja clave.
La docencia como vocación
Cuando se le pregunta por qué eligió ser maestro, Hugo reflexiona profundamente. “La necesidad de trascender”, responde. Su vocación nació de una introspección sobre lo efímero de la vida y el deseo de dejar una huella significativa más allá de su familia.
“Un profesor puede hacer un pequeño cambio en tantas personas, y eso es algo que me inspira todos los días”, explica.
Aunque su especialidad es la biología, Mr. Hugo también disfruta enseñar materias como química, ecología y filosofía, áreas que fomentan el pensamiento crítico. Para él, la docencia no solo implica transmitir conocimiento, sino también despertar la curiosidad y la capacidad de reflexión en sus alumnos.
Inspiraciones y frases para vivir
A lo largo de su vida, este profesor ha encontrado inspiración en pequeños gestos de otros docentes. Recuerda cómo una maestra le entregó una pequeña espada simbólica, recordando “ver más allá de lo evidente”. Este mensaje ha quedado grabado en su mente y lo motiva a buscar siempre más allá de lo superficial.
Entre sus frases favoritas se encuentran “Carpe Diem” y “Memento Mori”, conceptos que le recuerdan la importancia de vivir plenamente y ser consciente de la brevedad de la existencia.
“Tratar de hacer algo con lo que tenemos aquí y dejar huella es lo que me mantiene en la docencia”, concluye.
Un legado en construcción
Mr. Hugo sabe que ser maestro es mucho más que un trabajo; es un acto de fe en el potencial humano. Aunque reconoce que los resultados no siempre son inmediatos, cree firmemente en el impacto de sus enseñanzas a largo plazo.
“No voy a hacer que mis alumnos se conviertan en lo que serán, pero sí estoy haciendo mi pequeña parte en esa transformación”, dice con humildad.
La historia de Mr. Hugo no solo es la de un profesor, sino la de un hombre que busca trascender a través de su pasión por enseñar. Es un recordatorio de que, a pesar de los cambios y retos, el impacto que dejamos en los demás puede ser el legado más valioso de todos.